Querida comunidad escolar y en especial queridos chicos
Después de casi 38 años de trabajo ininterrumpido en la docencia es momento de poner un punto, de hacer un viraje, un cambio de rumbo. Es finalizar una etapa y comenzar una nueva, pero antes de dar vuelta a esta página no quiero dejar de agradecer.
Agradecer al colegio que me permitió crecer y desarrollarme profesionalmente de una manera cabal y siempre apuntando al crecimiento y superación. Tengo en el MODELO ONU uno de mis más preciados logros profesionales.
Agradecer a mis colegas de los cuales aprendí gran parte de las cosas que me formaron y con quienes compartí progresos, frustraciones y fundamentalmente momentos importantes de mi vida personal y afectiva. Me llevo grandes amigas y amigos.
Y por sobre todo agradecer a mis alumnos que me nutrieron de ganas y me permitieron disfrutar, y crecer, y compartir con ellos mi trabajo como docente. Que me dejaron entrar en su pensamiento y quizás contribuir en la construcción del mismo.
Chicos mil gracias por haberme dejado ser, por haberme permitido ser parte del juego y por el profundo respeto que siempre me han demostrado, y esto es una de las cosas que más voy a atesorar.
Chicos, esta profesión a veces puede parecer hostil, dura y poco reconocida, pero sin duda la elegiría una y mil veces más si retrocediera el tiempo y me enfrentara nuevamente a la elección de mi futuro profesional. Hoy lo puedo decir con toda convicción.
Para finalizar voy a apropiarme de una frase que no es mía pero no encuentro otra más apropiada para finalizar con estas palabras: “GRACIAS TOTALES”
HASTA SIEMPRE
Laura Giovannetti
